La Congregación de Jesús María de cuya familia todos somos parte, se encuentra transitando un año de agradecimiento y celebraciones, al cumplirse el bicentenario de su nacimiento, en Lyon, una bonita ciudad francesa, en medio de tiempos muy duros, como fueron los de la revolución francesa.
Hoy, 200 años después de aquella primera noche en la que Claudina dejó su casa y a su familia, para dormir por primera vez en la “Providencia”, semilla de una maravillosa obra, la Congregación de Religiosas de JM, se encuentra presente en 28 países, distribuidos en 4 continentes.
Las obras que en ellos se llevan a cabo son muy variadas y van intentando responder a las necesidades de cada tiempo y lugar. El carisma de Santa Claudina se expresa y se mantiene vivo y actual, en colegios, residencias, comunidades, casas de espiritualidad, centros misioneros, dispensarios, centros de integración, fundaciones, casas hogar…
El Espíritu crece y se multiplica desde una misma raíz, dando frutos siempre renovados y compartiendo la vida que crece y estalla en cada persona que comparte y resignifica el legado de Claudina.